A través de cinco consultorías, junto al trabajo colaborativo de la comunidad y actores locales clave del territorio, se identificaron aquellas áreas de los humedales que necesitan ser conservadas con mayor urgencia, acompañadas de una serie de acciones para su restauración.
El Proyecto GEF Humedales Costeros, iniciativa del Ministerio del Medio Ambiente en alianza con ONU Medio Ambiente, busca la conservación de los humedales costeros, bajo una perspectiva de cuencas y a través de usos sostenibles. Es por esto, que se llevaron a cabo consultorías de identificación y priorización de áreas de restauración ecológica para los cinco humedales en donde desarrolla experiencias piloto: desembocadura del río Elqui (región de Coquimbo), humedal de Mantagua (región de Valparaíso), laguna de Cáhuil (región de O’Higgins), sistema humedal Rocuant-Andalién (región del Biobío) y humedales del río Queule (región de La Araucanía).
“Para cada uno de los humedales se levantó información ambiental y se recolectaron datos a través de talleres participativos con actores claves y miembros de los Comités Técnicos Locales del Proyecto en las cinco regiones”, cuenta Claudia Silva, coordinadora nacional del Proyecto GEF Humedales Costeros. Como resultado, los equipos consultores identificaron aquellas áreas de los humedales que necesitan manejo para su conservación con mayor urgencia, y además presentaron una propuesta de acciones de restauración para los ecosistemas. Estas actividades varían según las características de cada humedal, por lo que fueron divididas en base a diferentes factores.
“En laguna de Cáhuil, por ejemplo, las acciones fueron separadas en sectores del humedal, respecto a las priorizaciones hechas por la comunidad. Es así, como algunas actividades fueron pensadas para realizar en el cuerpo de agua, otras en las zonas buffer y otras en la cuenca”, comenta Luis Araya, coordinador local del Proyecto GEF Humedales Costeros en la región de O’Higgins. En tanto, en el humedal de Queule, en el humedal Rocuant-Andalién y en la desembocadura del río Elqui, las acciones se dividieron, principalmente, en base a los tipos de humedales presentes en el ecosistema. “En el caso del humedal de Mantagua, la restauración propuesta está asociada a las diversas amenazas presentes en el humedal, como erosión, contaminación o degradación de hábitat, entre otras”, señala Cyntia Mizobe, coordinadora local del Proyecto en la región de Valparaíso.
No obstante lo anterior, en los cinco casos de estudio las acciones de restauración también responden a actividades de educación ambiental, a estrategias políticas administrativas, a medidas asociadas a degradación y pérdida de biodiversidad, entre otras. “Estas acciones podrán ser ejecutadas inicialmente en los proyectos piloto, en nuestro caso en algunas secciones del río Elqui, pero según los resultados pueden escalar en tamaño en cada sector priorizado”, cuenta Carolina Vega, coordinadora local en la región de Coquimbo.
Como lo indican los informes entregados, el éxito de la restauración de los sectores priorizados en los humedales, dependerá, entre otros factores, de la información científica requerida para sustentar las decisiones, de una correcta estrategia de manejo adaptativo, de una buena gobernanza a nivel local, de la innovación tecnológica disponible y de la participación de los diferentes actores en la toma de decisiones y en la ejecución de la restauración. Asimismo, la implementación de las estrategias y actividades de restauración serán parte de los Planes de Gestión Integral que se están elaborando en las cinco regiones piloto.
La información y experiencia de estas consultorías servirá de insumo para una guía que elaborará el Proyecto GEF Humedales Costeros, la que tendrá por objetivo orientar el trabajo de restauración ecológica en otros humedales. De esta forma, con el documento se podrá avanzar en la restauración de ecosistemas costeros del país.
Los informes de identificación de áreas prioritarias a restaurar y las acciones propuestas, están disponibles en el sitio web del Proyecto GEF Humedales Costeros, con el detalle de cada uno de los cinco humedales.
Accede aquí a los informes:
- Desembocadura del río Elqui
- Humedal de Mantagua
- Laguna de Cáhuil
- Humedal Rocuant-Andalién
- Humedales del río Queule
A continuación, se presentan algunas acciones de restauración propuestas en los humedales piloto del Proyecto GEF Humedales Costeros.
Medidas asociadas a contaminación:
- Plan de fitoremediación
- Humedales artificiales para disminuir la contaminación
- Limpiezas asociadas a contaminación
- Filtración de aguas lluvias con estructuras artificiales o naturales
- Incorporación de zanjas depuradoras y filtrantes
Medidas asociadas a pérdida de biodiversidad:
- Plan de restauración para hábitat de fauna
- Habilitación de pasos de fauna silvestre
- Construcción de corredor biológico (reforestación, franjas de vegetación natural, restauración pasiva-cercado)
- Entre otras.
Medidas asociadas a degradación/erosión:
- Reforestación en fragmentos de bosque nativo y en dunas
- Fajinas de rama
- Empalizadas
- Diques de contención
- Bancales
- Instalación de cercos perimetrales y cerrar accesos con cercos naturales
- Control de especies exóticas
- Restauración de quebradas y cursos de agua
- Remoción de escombros y microbasurales
- Exclusión de ganado en épocas de inundación
- Eliminar agentes que evitan la recuperación natural
- Entre otros
Medidas asociadas a estrategias político-administrativas
- Unir ecosistema objetivo a corredor biológico existente
- Fortalecer la regulación hídrica
- Implementación de un Protocolo de manejo de la barra
- Fortalecer la fiscalización
- Regular actividades de pesca (con planes sustentables) y paseo de mascotas
- Delimitación de línea de playa
- Entre otros
Medidas asociadas a educación ambiental
- Instalación de infografías y señaléticas educativas
- Implementación de Planes de educación ambiental
- Difusión del impacto antrópico al ecosistema
A continuación, se presentan los mapas de las áreas prioritarias a restaurar en cada humedal: