Las labores de restauración desarrolladas en la región de O’Higgins toman relevancia esta semana, con motivo del Día Mundial del Medio Ambiente celebrado el pasado 5 de junio, cuyo lema este año es «Nuestras tierras, nuestro futuro” y #GeneraciónRestauración.
Como parte de las acciones impulsadas por el Proyecto GEF Humedales Costeros en la región de O’Higgins, se están implementado acciones de restauración, específicamente en el humedal laguna de Cáhuil, con el objetivo de recuperar y conservar su funcionalidad ecosistémica.
Se trata de dos acciones principales. La primera, es la elaboración e implementación del protocolo de manejo de la barra del humedal Cáhuil, que trabaja directamente en restaurar el balance de sedimentos en la zona de la desembocadura del humedal. Esta acción tiene un impacto significativo en la regulación frente a inundaciones, entre otros beneficios.
Giovanna Amaya, SEREMI del Medio Ambiente de la región de O’Higgins, señala: “El desarrollo y ejecución de este protocolo de manejo de la barra, es un paso crucial para garantizar la sostenibilidad y la resiliencia de nuestros humedales. Estos ecosistemas son vitales para la biodiversidad y la protección contra inundaciones, y su restauración es muy necesaria para nuestra región. Esto va de la mano con la preservación de la naturaleza que ha impulsado el Gobierno Ecológico del Presidente Gabriel Boric”. Para ello, se ha trabajado con rigurosidad científica, buscando acciones de adaptación frente al cambio climático, “lo que presenta un desafío necesario de abordar, a fin de intervenir la barra de arena minimizando los impactos que se pudieran provocar”, añade la Seremi.
La aplicación de este protocolo se realiza específicamente en el sector de la desembocadura del humedal, “donde tiene el mayor impacto sobre el balance de sedimentos. Sin embargo, este esfuerzo repercute en toda la superficie del cuerpo de agua, mejorando el servicio ecosistémico de regulación frente a inundaciones y aspectos tan importantes como la oxigenación del agua, entre otros”, explica Luis Araya, coordinador local del proyecto GEF Humedales Costeros.
El objetivo del protocolo es disminuir la degradación de la dinámica de las aguas y los sedimentos de la desembocadura de la laguna Cáhuil, restaurando la provisión de servicios ecosistémicos y el hábitat para las especies presentes que brinda. Para esto, se ha estado trabajando en conjunto con la Municipalidad de Pichilemu, la SEREMI del Medio Ambiente O’Higgins, y la Capitanía de Puerto de Pichilemu, en lo operativo. Además, se busca consolidar el sistema con la colaboración del Servicio Nacional de Prevención y Respuesta ante Desastres (SENAPRED) O’Higgins, considerando que uno de los objetivos del protocolo es minimizar los riesgos de inundación en el entorno de la laguna. También participan la Dirección General de Aguas (DGA) O’Higgins, la cooperativa de Salineros de Cáhuil y la Delegación Presidencial Provincial de Cardenal Caro.
La segunda acción que se está llevando a cabo es una restauración terrestre, que incluye la conservación del suelo y la reforestación de especies de flora nativa. Esta iniciativa se está llevando a cabo en un predio del sector de Villa Esperanza en Cáhuil y otro en el sector de El Bronce, ambos adyacentes a la laguna. Estas labores buscan recuperar las funciones ecosistémicas de los sitios degradados circundantes al humedal, aumentar la cobertura vegetal, incrementar el porcentaje de árboles nativos y reducir la erosión y el transporte de sedimentos hacia la laguna Cáhuil.
Para esto, ha sido crucial el apoyo de los dueños de los predios y la coordinación con el Proyecto GEF Restauración y la Municipalidad de Pichilemu. “La colaboración entre las diversas entidades y la comunidad local es fundamental para el éxito de estas iniciativas, ya que el Proyecto GEF Humedales se encuentra en su año de cierre, por lo que gracias al compromiso de los actores y autoridades locales estas acciones tendrán sostenibilidad en el tiempo”, agrega Luis Araya.
Todos estos trabajos son un esfuerzo conjunto para preservar y mejorar el entorno natural, y están en línea con los objetivos globales de restauración de ecosistemas que se recuerdan en este Día Mundial del Medio Ambiente.